Apto para niños de 2 a 5 años En un día con viento de otoño, Marla Pequeña baja corriendo de la colina gritando, Ayuda! Mi calabaza gigante se va rodando! Allí va, rodando y girando, sin señas de detenerse! La-lala-larí! Qué podría hacer aquí? Una niña persigue su calabaza gigante por toda la ciudad con alguna ayuda en el camino.
La repetición hace que sea fácil para los niños pequeños comprender y leer..
La historia es simple pero dulce.
He disfrutado de este relato muy sencillo que es ideal para niños de un año de edad, pero más para lectores primerizos alrededor de los tres años porque iniciará conversaciones.
Este libro tiene detalles muy interesantes y muy bonitos dibujos e historia.
Las ilustraciones son hermosas, coloridas y extravagantes.
Muy agradable.
La historia y el arte, junto con el diseño profesional del libro sitúa este título hasta allí con lo mejor de lo mejor.
Una palabra viene a la mente cuando se describe el arte de Daniela Volpari; excelencia.
Este podría ser un clásico instantáneo Este fue una ingeniosa historia escrita de una manera que bien puede hacerla eterna, pues evoca relatos clásicos que le harán sentirse nostálgico.
Cinco estrellas para este maravilloso libro.
He encontrado que las ilustraciones son excepcionales y la historia aún más.
Pertenece a todas las bibliotecas e imagino que pronto estará en las bibliotecas de todo el mundo en espera de los lectores.
Lo que los críticos están diciendo: Este es un libro infantil galardonado que puede entretener a jóvenes y adultos.
Cada página es una bella obra de arte y es uno de esos libros cuyas imágenes perdurarán mucho después de que haya pasado la página.
Este libro de imágenes para niños está exquisitamente ilustrado por la galardonada ilustradora italiana, Daniela Volpari.
El autor usa estructuras de frases repetitivas para captar la atención de los jóvenes oyentes y dar rápidamente confianza a los lectores primerizos .
Es el cuento perfecto para leer con su pequeña calabaza.
Apto para niños de 2 a 5 años En un día con viento de otoño, Marla Pequeña baja corriendo de la colina gritando, Ayuda! Mi calabaza gigante se va rodando! Allí va, rodando y girando, sin señas de detenerse! La-lala-larí! Qué podría hacer aquí? Una niña persigue su calabaza gigante por toda la ciudad con alguna ayuda en el camino
