Para las Muchachas que fuimos, para la muchacha que fui, para las Muchachas de todo el mundo que son como nosotras solíamos ser.
A pesar de añorar tener una familia unida y un hogar seguro, éstos eran difíciles de conseguir viviendo bajo los niveles de pobreza en e.
Jaquira Díaz siempre se encontró entre extremos en lugares permeados por la violencia.
Para las Muchachas ordinarias.
Para las Muchachas que nunca se vieron reflejadas en los libros.
Para las Muchachas que fuimos, para la muchacha que fui, para las Muchachas de todo el mundo que son como nosotras solíamos ser